Màrius Carol me da la razón (indirectamente)

El magnífico columnista de La Vanguardia, en su artículo de hoy (15/4/2013), refuta el manifiesto que yo ya hice en un escrito de este blog sobre la desconfianza ante la banca y como ahora, tras su rescate, hacen todo lo posible para recuperarla.

Más concretamente, si recordáis, escribí sobre el caso Bankia y su nuevo anuncio, dónde la polémica entidad financiera nos quería dar entender, con una campaña publicitaria, que eran una "nueva Bankia". 

Es así, como Màrius Carol en su escrito de hoy, llamado "La fe en la banca", expresaba lo siguiente:

"Algunas entidades han decidido encarar el problema y en su publicidad se disculpan por sus errores, intentan ser más transparentes y se acercan a sus clientes con un lenguaje más cercano y comprometido. La banca intenta enseñar su rostro más humano en sus reclamos, aunque la situación de la economía española no les ayuda en nada. Si una palabra se repite en los spots de las entidades es confianza, una forma de reconocer que la gente ha perdido en gran medida su fe en los bancos y cajas. "

En efecto, confianza y confianza y más confianza. Esto es lo que buscan. Pues precisamente es lo que los ciudadanos deberíamos evitar. No podemos volver a caer en la trampa. Porque en primer lugar no se puede confiar en esta gente, que tal como contamos, vendieron preferentes, deuda subordinada y muchos otros productos tóxicos, sin ningún tipo de rencor. Y en segundo lugar, porque no es aceptable que mientras haya gente desahuciada, que pasa hambre y penurias y sin una vida digna, se rescate a los bancos y no a las personas. Parecerá populista está frase, pero es que es así. Yo no digo que el sistema financiero no se haya de sanear, pero todo tiene una prioridad. Y, creo yo, que esta no está por delante de todas las las otras.

Ya sea yo quien lo diga, Màrius Carol o la vecina del quinto, el primer paso antes de todo, es no dejarse engañar y proceder a la indignación. Sin embargo, debe ser una indignación que dure porque en otros casos, por mal que me sepa, como es el 15M se han acabado dado por vencidos..... Pero repito, por mal que me sepa, porque ya aguantaron mucho y merecen reconocimiento por ello, aunque quizá no lo suficiente.