lunes, 1 de abril de 2013

El Autódromo de Sitges-Terramar

Es curioso pero este mundo está repleto de sitios peculiares. Algunos más lejos que otros, pero muchas veces nos quedamos encerrados en nuestro barrio, ciudad o comunidad de vecinos y por rutina, desgraciadamente, no nos movemos mucho más de ahí excepto para ir al trabajo. Un desplazamiento que por cierto,  no es por voluntad sino por obligación y por necesidad. En conclusión, aunque no hay que generalizar, somos vagos.

Sin embargo, de cuando en cuando, no viene mal moverse un poco para conocer mundo. Y mundo no me refiero necesariamente a gastarse 1000€ en un billete de avión para ir a la India, que está muy bien, pero me parece que no todo el mundo se lo puede permitir. A mundo, me refiero a explorar sitios cerca de nosotros y que muchas veces por el simple hecho de estar tan cerca, no nos preocupamos ni siquiera en conocer.

Yo hoy os hablaré de un sitio curioso que he descubierto, bastante cerca de Sitges (Garraf, Barcelona) donde he pasado esta Semana Santa. Este es el Autódromo de Sitges-Terramar, situado apenas a unos minutos del conocido pueblo de mar.

Adopta una forma oval muy característica de los autódromos de época, es del año 1923 y está en desuso desde los 50 aproximadamente. Por lo que me he informado, este tiene una relevancia que no nos podemos ni tan solo imaginar. Fue el tercer autódromo de Europa y en el se celebró la edición primeriza del Gran Premio de España. Pero aún hay más, en su inauguración acudieron el propio Primo de Rivera (época de dictadura 1923-1930) e incluso Alfonso XIII quien no estaba en el trono pero aceptaba por consenso el régimen militar.
¿Increíble, no? Pues está a unos 10 minutos en bici del conocido Sitges.

Ahora, desgraciadamente, está completamente abandonado. Debe ser de propiedad privada, porque parece ser que a los dueños no les gusta demasiado que la gente ande por ahí ya que en la entrada, hay una advertencia donde se amenaza con un "peligro perros".

Sin embargo, como buena noticia, me ha parecido ver un cartel del ayuntamiento donde ponía algo, no demasiado claro, como si lo fueran a restaurar. Ojalá sea así y inviertan en patrimonio histórico en vez de en aeropuertos inútiles como el de Castellón o también conocido como el "aeropuerto del abuelo". Pero esto no corresponde ahora, aunque tocará hablar de él algún día...

En conclusión, el Autódromo de Sitges-Terramar es uno de los muchos ejemplos que podemos dar para demostrar que tenemos cosas muy bonitas y interesantes mucho más cerca de lo que creemos y sin necesidad de desplazarse en exceso.






No hay comentarios:

Publicar un comentario